YA BASTA! Historias de un chaval de barriada para denunciar el repugnante asedio de los del 155 a nuestra escuela y sus docentes

Hola, me llamo Francesc Abad, aunque también soy para mucha gente Paco, Quico, Cisco o incluso "Francisquito".

A veces me pregunto por qué hablo de mi en algunos posts que de vez en cuando escribo. A veces también me lo pregunta mi madre. Y siempre le respondo que tiene razón, pero que cuando lo hago es porque creo que para explicar ciertas cosas es mejor hacerlo a partir de la experiencia personal, concreta, que no en abstracto.

Hace poco escribí un post en el que hablaba de lo importante que era, en cualquier conflicto, también en la situación de Catalunya, mantenerse humano. El argumento lo había sacado del Canal Historia de TV, de ese anuncio suyo en el que dicen "en la guerra lo importante no es mantenerse vivo, sinó mantenerse humano".

Apelaba al unionismo, al españolismo, para que se mantuvieran humanos en este momento político por el que estamos atravesando. Explicaba que me hubiera gustado tener delante un unionismo humano, y no este unionismo inhumano de los Rivera, Arrimadas, Albiol... La inhumanidad de burlarse y alegrarse de rivales políticos en la prisión o en el exilio. La inhumanidad de construir un relato político basado exclusivamente en la amenaza, en la mentira, en la manipulación, en el menosprecio. La inhumanidad de un discurso únicamente para sembrar y extender el odio.

De entre toda esta inhumanidad hay una mentira que, por lo que soy, por lo que he vivido, por mi familia, me resulta especialmente hiriente: todo lo relativo a la repugnante y sistemática mentira sobre la escuela catalana, a la repugnante persecución de sus docentes y a la miserable acusación de adoctrinamiento.

La escuela catalana es uno de nuestros mayores patrimonios colectivos. Y sus docentes, unos enormes profesionales. La escuela catalana enseña, no adoctrina. La escuela catalana forma personas libres, capacitadas a decidir libremente. La escuela catalana derriba las barreras sociales y trabaja porque todos los escolares tengan las mismas oportunidades.

Muchas veces me quedo pensando por qué lo hacen, por qué són tan vergonzosamente irresponsables para mentir como lo hacen, para querer destruir como quieren destruir una escuela que es y será un orgullo como país, como sociedad. Y siempre acabo igual, "joder, paquito, pues porque lo que quieren es justamente rebentar nuestra sociedad, porque no les interesa ni quieren gente formada y libre, sinó gente facilmente manipulable, porque no les interesa derribar barreras sociales, sinó levantarlas, de origen, de lengua, de lo que sea".

Yo llegué, con mis padres, poco antes de cumplir los 4 años, al barrio de San Ildefonso, la ciudad satélite, en Cornellà de Llobregat, desde Lora del Río. Mis padres eran maestros. Yo fui a una de las escuelas pública del barrio, "el San Ildefonso". Ni una sola clase en catalán. Cuando llegué al BUP era un perfecto analfabeto en catalán, no tenía ni la más remota idea de escribir nada en catalán.

Mi padre, maestro murciano en San Ildefonso, eso lo veía, que todos los chavales que ahí estudiábamos no teníamos ninguna oportunidad de conocer o aprender el catalán. Estoy hablando del tardofranquismo. Con otros profesores intentaron que aquellos chavales del barrio de San Ildefonso no fuéramos unos analfabetos en catalán. Y fíjate, las vueltas que da la vida: una denuncia anónima, como las que ahora quiere promover la señora Levy del PP, llevó a mi padre, maestro murciano preocupado por proporcionar una formación en igualdad de oportunidades a todos los chavales, a ser detenido por la brigada político-social. 

Lo que impulsó a mi padre y a otros maestros del barrio a promover esa reivindicación que acabó con su detención fué lo mismo que impulsó a los padres de Santa Coloma de Gramanet a pedir la immersión lingüística en la escuela. Era la única posibilidad de que la escuela pudiera derribar las barreras sociales de origen, y darnos a todos los escolares las mismas oportunidades.

Y justamente lo que persiguen la gente de C's y del PP con su discurso de odio contra la escuela catalana es acabar con eso, acabar con la escuela como herramienta social capaz de derribar barreras e igualar en oportunidades.

Yo no recibí en toda mi EGB ni una sola clase en catalán, ni de catalán, ni de cultura o historia de Catalunya. Nada. Sí tuve que aprenderme la letra fascista del himno español que compuso Pemán. Sí, aquella de "Viva España, alzad los brazos hijos del pueblo español, que vuelve a resurgir...". Eso sí que era adoctrinamiento. Yo todavía recibí castigos físicos en esa escuela del tardofranquismo. Recuerdo especialmente un profesor muy pegón que teníamos en sexto. Su castigo favorito era ponernos delante de toda la clase, entre la pizarra y la primera fila, nos daba a escoger la mano, y teníamos que extender el brazo horizontalmente, y poner la mano con los dedos recogidos en punta hacia arriba. Una vez estábamos así, nos atizaba con una regla que siempre tenía en su mesa. Un día, de tan fuerte que me dió, la rompió. Era un profesor muy del régimen, que en cuanto el catalán entró en las escuelas se largó. A él nadie le iba a "imponer" el catalán, decía. Esa era la escuela del tardofranquismo que añoran y que reivindican C's y PP.

Pero yo tenía ojos, y veía. Tenía orejas, y escuchaba. Tenía corazón, y sentía. Tenía cerebro, y pensaba. Tenía alma, y me comprometí. A todo esto me ayudó mi paso por los movimientos de base de la iglesia, por la JOBAC (Joves Cristians de Barris Obrers i Ambients Populars), porque me enseñaron a hacerme preguntas y a ser comprometidamente crítico con el entorno en el que transcurrían nuestras vidas.

Y así es que un chaval de barriada, después de pasar por la escuela franquista, se metió a militar en un independentismo que en aquel momento era poca cosa más que testimonial. Qué adoctrinamiento de qué escuela me llevó a ser independentista??? Va, por favor, ya basta de tanta mentira e intoxicación! YA BASTA!

No somos independentistas por adoctrinamiento, sinó porque somos personas, tenemos capacidad de pensar, de relacionarnos con nuestro entorno y de comprometernos. Atacais la escuela catalana y a sus docentes no porque adoctrina, que ya sabeis que no lo hace, sinó porque forma personas, porque educa, porque proporciona las herramientas para derribar las barreras sociales y porque trabaja para que todos tengamos las mismas oportunidades. Eso es lo que os quereis cargar, y sabeis que solamente lo podreis hacer instaurando un régimen de terror, sometiendo a toda nuestra sociedad al miedo, inculcando un miedo tal en todos nuestros docentes que dimitan de su obligación de formar personas capaces de pensar en libertad, de conocer y ser capaces de valorar críticamente el medio y la sociedad en la que viven.

Una sociedad prisionera del régimen de terror de las denuncias anónimas, como la que llevó a la Brigada Política Social del franquismo hasta mi padre. Eso son C's y PP, esa es la sociedad a la que nos quieren condenar. Esa es su única cultura social: la del miedo y la de la represión. Y en coherencia con todo ello, los comportamientos sociales que están promoviendo son los del odio, los de la ignorancia, los de la negación de la propia realidad en la que transcurren nuestras vidas.

No lo vamos a permitir. Defenderemos nuestras escuelas. Defenderemos nuestros maestros. Nunca más nadie analfabeto en nuestras propias lenguas, sea catalán o sea castellano, que ambas forman parte de nuestro patrimonio como sociedad, ni ignorantes de las lenguas que nos abren las puertas del mundo y nos proporcionan las máximas oportunidades como país y individualmente. Nunca más denuncias anónimas, nunca más Guardia Civil, fiscales, policía nacional o brigadas de lo político-social yendo a buscar maestros a la puerta del aula, como fueron a por mi padre, o como fueron, el 1939, a por tantos maestros de la República.

Defenderemos la libertad, nuestra libertad y una sociedad y un país de hombres libres que piensan en libertad. Defenderemos nuestro derecho a despertarnos cada mañana sin miedo. Defenderemos nuestro derecho a tener un futuro.

Defenderemos la República Catalana.